Industria con operaciones de montaje, donde los ciclos de trabajo son “largos” y donde se juega mucho con rotaciones de puestos durante la jornada laboral. Tradicionalmente se mejora la componente estática de la exigencia física estableciendo criterios dimensionales en los puestos para adecuarse a la altura del trabajador; pero el principal problema es la componente dinámica, los movimientos que el trabajador tiene que hacer con cada parte del cuerpo.
El trabajo repetitivo y largo exige muchas operaciones y acciones en cada puesto de trabajo, además la complejidad de trabajar diferentes modelos. Todo se traduce en mucha variabilidad de acciones en cada puesto, y complica acertar dónde vale la pena hacer cambios. Es entonces cuando nos contactan para que les hagamos un análisis ergonómico exhaustivo y cuantitativo, que identifique con precisión las intervenciones que se deben hacer para reducir los riesgos de trastornos musculo esqueléticos.